viernes, noviembre 13, 2009



Por mucho que se hunda la húmeda resaca en el musgo

los pies no recuerdan

como fue su marca

al levantarse la primera vez.



Imagen de la serie 'AMNIA Y LUZA'

9 comentarios:

Antonio Tello dijo...

Tan leve es la existencia que dejar huella se convierte en un esfuerzo que lleva la vida.
Muy hondo, querida Natalie.

Santiago Paz dijo...

Hay huellas que pasan y no quedan.


Beijos.


Santiago.

Ferragus dijo...

Pido (suplico) al musgo que nunca olvide…

Saludos y besos, Natalie.

Don Xmar dijo...

Precioso Natalie. Me ha encantado la foto sobre todo.
Oye, nos intercambiamos enlaces? Ya te he linkado desde mi blog.
Por cierto hoy creo que veré El Chacal del Nahueltoro, que aun no la he visto desde que hablamos!! Besos

Camila Mardones dijo...

Qué tierno.

Anónimo dijo...

todo nos lleva a caminar y no mirar lo que dejamos atrás.
¿Porqué?

Un abrazo darling.
:)

mentecato dijo...

Huellas y olvidos...

Y a veces una quebradiza hoja con nervadura de nieve.

Un abrazo.

JON M ALTUNA dijo...

El musgo recuerda, al igual que el agua. E cosí.

mentecato dijo...

Un gran abrazo de fin de año.