martes, enero 15, 2008

DESPLIEGUE BATLLÓ


Darse vida
en un espacio de mudos arbotantes
bajo pilares ambientados sin tiempo
aligerados con las réplicas de lo nuevo
calcificados en la mirada del soñador.

Abrirse
a la divina concordancia del centro
pinchando la luz con los dedos
enrolando la vista en las curvas
colmándose a tarascones
de los ruedos multiformes de un vitral.

Roer
con dicha la pulcra guarida
habitage de blancos gusanos
saltones inyectos de savia intramar.

Ambientarse
por lo más alto de terrazas y mandatorios
donde escupe al aire las convenciones
y descuelga el andamio de las nubes
y bajan en cruz los pies descritos
para ir a calzarse
con las esferas de fragmentos alabados.

Transitar
por este complejo veneciano futurado,
donde no son más los muros como mismos
y se habitan como dotes de autor
como gestos jugando al escondrijo
como alcobas nupciales donde se encinta
a la cal y el universo.

Brincar
de un paso largo la brecha abierta
entre una fe loca y la avenida
para darse con el desfatache principal:
óseoyermo, marinolunar,
el rostro de la morada urdida a trizas
que empalma al cielo con las olas
que truca al cosmos en casa y puertas
en residencia osada
en una piñata de tiempo y fiesta.