lunes, septiembre 11, 2006

Nombre Propio

Anoche me obsesioné con un nombre. A veces, justo antes de dormir, se me estrellan en la mente pensamientos que no me sueltan hasta que caigo dormida o los agoto. Comencé a pensar en lo extraño que me resulta el nombre Claudio, sintiendo que eventualmente nunca le pondría ese nombre a un hijo, no por feo, sino por ajeno. Recordé a los Claudios con lo que me había topado en la vida. Eran pocos, solo les visioné las caras a un par de amigos de la adolescencia, que también eran amigos entre sí, pero que ninguno de sus rostros cuajaban con el nombre Claudio...
Hoy en la mañana, me llamaron del taller de costura. Claudio, el taxista que nos lleva los encargos todas las semanas, se había suicidado el sábado. Anoche no llegó a mi mente, pero hoy recordé cuan puesto tenía el nombre en su cara...se llamaba Claudio con toda propiedad...

10 comentarios:

Eduardo Varas C dijo...

El peso de los nombres propios, ¿no?

Incluso hay un juego de arbitrariedades en el cómo te llaman o te llamas, que termina (depende del grado de aceptación que manejemos) en nuestros rostros asemejando a esa palabra que nos designa... o no.

Quizás Claudio cargó el sino de que su nombre lo determinara, que fuera propio... y no lo pudo soportar.

Y ya sabemos que las palabras suelen ser cargas, para siempre...

Saludos

Galo Roldós Arosemena dijo...

Hola, Natalie, me llamo GALO; por favor, si alguna vez este nombre se te desliza por la cabeza, al primer indicio de infiltración de una idea respecto a este nombre en tu mente, me avisas!!!

Y siento mucho lo de Claudio.

Salu2!

G.R.A

la hambrienta lúcida dijo...

jaja Galo qué coqueto.

Ve! Varas, Galo escribió Salu2... te cae mal? jeje

becho

********

la hambrienta lúcida dijo...

y por fijarme en los comentarios olvidé comentar...

por ejm. yo no me quisiera a veces llamar como me llamo (aunque me gusta vanidosamente y extremadamente mi nombre), pero me crea problemas o me carga de seriedad que a veces me falta... y muchas veces me asfixia.

Claro que no me llamo micifús, si así fuese, probablemente dijera miau y la vida fuera más sabrosa.

Luis Herrera dijo...

por acá hay un claudio que tiene más cara de César; su hijo César, tiene más cara de Claudio, sin duda.

saludos

Då®th Pëgå$ø Nåzgü£ † ™ dijo...

yo al menos no me preocupo de eso ya que se que mi polola tiene los nombres listos

a mi me gustan y se escuchan re bien

en realidad son como las mujeres las ke tienen mas ke decir al respecto

nos leemos

Anónimo dijo...

Ayer en la noche me pasó algo similar, estube horas pensando... pero con Gaetano, k será, no conosco ningún Gaetano... fue muy extraño, ¿no será un mal de familia?
Muchos cariños por esos lados y nos estamos viendo...

Anónimo dijo...

Ayer en la noche me pasó algo similar, estube horas pensando... pero con Gaetano, k será, no conosco ningún Gaetano... fue muy extraño, ¿no será un mal de familia?
Muchos cariños por esos lados y nos estamos viendo...

Anónimo dijo...

A veces a mí se me hace mi nombre completamente ajeno. Y lo repito, lo repito y siento que no encajo en él.
Tal vez debí llamarme Cecilia.

pd: Mi nombre no es auravioleta, ni aura, ni violeta.

Enrique de Santiago dijo...

El sonido claudio, fue una suerte de premonición, cuando te venga a la mente el nombre Enrique, me avisas, para así apurar algunos tramites.
Un abrazo